Herpes Genital
El herpes genital es una infección de transmisión sexual. Afecta aproximadamente al 2% de las personas adultas.
La enfermedad se manifiesta por la aparición de pequeñas vesículas o ampollas, dolorosas que se agrupan en grupos a nivel de los genitales y el ano. Estas lesiones perturban seriamente la vida sexual de las personas afectadas.
Es una infección crónica ya que el tratamiento medico no puede curar la enfermedad por completo, si se presenta una recidiva muy frecuente, una circuncisión disminuye en una gran medida el problema.
Causas
La infección es causada por el virus herpes simplex, un tipo de virus similar al responsable de herpes labial.
El herpes genital se transmite principalmente durante las relaciones sexuales con o sin penetración, con una persona con lesiones de herpes en los genitales, las nalgas o muslos, o simplemente son portadores del virus asintomáticos.
La transmisión puede ser durante el contacto sexual vaginal, anal u oral. Durante las relaciones orales, el virus puede pasar de la región de la boca al área genital o viceversa
Una vez en el cuerpo, el virus permanece de por vida, «latente», sin causar síntomas fuera de la «episodios sintomáticos» o «crisis» , estas pueden ser desencadenada por diversos factores como el estrés, la exposición al sol , Fiebre o determinados alimentos o bebidas (cacahuetes, alcohol, café).
Síntomas
Muchas personas infectadas con herpes nunca tienen síntomas y no saben que son portadoras de herpes.
Los primeros síntomas de infección son prurito (picazón), quemazón, hormigueo a veces acompañada de fiebre, dolores de cabeza y de estómago, a veces una inflamación de los ganglios linfáticos sensibles acompaña a estas manifestaciones clínicas. Pequeñas vesículas agrupadas en «racimos» aparecen en los genitales o cerca de estos (nalgas, muslos, anal…). Estas ampollas, cargados con virus, al romperse generan pequeñas erosiones, a veces muy dolorosas que cicatrizan después de 2 a 3 semanas. En las mujeres, estas lesiones también pueden estar situadas en la vagina y cuello uterino.
Posterior a la primo infección, la enfermedad se manifiesta como «brotes herpético”, aparecen pequeñas ampollas en el pene, vulva, ano, nalgas y / o muslos duran de 3 a 7 días, son menos dolorosas que durante el episodio de infección inicial. Picazón y hormigueo en los órganos genitales, son síntomas que la persona reconoce antes de la aparición del las ampollas, molestias relacionadas a una crisis inminente. La frecuencia y la gravedad de los brotes varían de persona a persona.
Prevención
Los principales factores de riesgo son las relaciones sexuales sin preservativos y la promiscuidad con diferentes parejas sexuales.
El uso del preservativo, es altamente recomendado si una pareja es portadora del virus, evitando tener relaciones durante la fase activa de la enfermedad.
Las mujeres embarazadas que sufren de herpes genital activo, por lo general dan a luz por cesárea para prevenir la transmisión del herpes al bebé. Es importante señalar al médico toda la historia de herpes para prevenir la infección herpética durante el embarazo.
Tratamiento
Los brotes son manejados por las aplicaciones locales temprana con cremas antivirales. El uso de antivirales orales (comprimidos o solución oral) se utiliza para el tratamiento de recidivas múltiples y/o Herpes complicado. la técnica quirúrgica simple de Circuncisión , permite resecar una parte del prepucio provocando un cambio en el epitelio peneano, disminuyendo de manera significativa los episodios y gravedad de las lesiones herpéticas