Dispareunia
¿Qué es la dispareunia y como se manifiesta?
Se define como los dolores que ocurren durante las relaciones sexuales y se dividen en dos tipos: aquéllas que aparecen al principio de la relación (dolores a la penetración) y los que se experimentan cuando el pene entra en contacto con el fondo de la vagina (dolores profundos).
Los dolores en las relaciones sexuales pueden acompañarse, según las causas, de una sensación de quemadura o irritación, de malos olores, de una pérdida de sangre, de secreciones vaginales anormales.
¿CUALES SON LAS CAUSAS?
DOLORES EN LA PENETRACIÓN
Insuficiente lubricación de la vagina. Falta de excitación, problemas hormonales, infecciones, etc.
Infecciones vaginales, como la vaginitis micótica o bacteriana.
Grietas o Fisuras a la entrada de la vagina. La causa de esta grieta no se conoce en realidad, pero probablemente una herida mal cicatrizada, a continuación, la piel se rasga al perder su elasticidad.
Utilización de jabones irritantes o de soluciones de higiene interna (duchas vaginales).
Enfermedades crónicas de la piel: que afectan a la región genital (eczema, liquen escleroso, liquen plano, liquen simple, etc.).
Atrofia vaginal (en la mujer menopausica). Los ovarios no secretan estrógenos. La mucosa de la vagina se reduce menos y se lubrica, el orificio de la vagina se estrecha, haciendo a veces la penetración dolorosa.
Vulvodinia. El origen de esta irritación de la vulva, es una raíz nerviosa dañada , hay sensación de quemadura y a veces dolor al orinar. Las relaciones sexuales son a menudo dolorosas, o incluso imposibles.
Vestibulitis: Esta inflamación del vestíbulo (entrada de la vagina) es una patología compleja, causada por una excesiva cantidad de oxalato (ácido oxálico) en las secreciones vaginales. Se caracteriza por una sensación de quemadura cuando se estimula la entrada de la vagina.
DOLORES PROFUNDOS
Salpingitis: La infección de unas o más trompas uterinas (trompas de Falopio) es la causa principal de infertilidad, a menudo se acompaña de hemorragias menstruales anormales y aumento de los dolores durante y entre las menstruaciones.
Endometriosis. El tejido que recubre normalmente el interior del útero (endometrio) se desarrolla fuera del útero, en el abdomen y a veces incluso en la vejiga. La causa exacta de este fenómeno no se conoce, pero se sabe que estos fragmentos de tejido uterino siguen el ciclo hormonal. Lo que significa, que cuando la mujer tiene sus reglas , hay también hemorragias en el abdomen o la vejiga. El dolor evoluciona según las fases de los ciclos menstruales.
CONSEJOS ÚTILES PARA LA DISPAREUNIA
Utilizar un lubricante en las relaciones sexuales. Si el dolor se debe a una falta de lubricación de la vagina, la utilización de lubricantes líquidos (y no de GEL) facilita la penetración. Es recomendable aumentar el tiempo de erotización o juegos preliminares, con el fin de favorecer una buena lubricación, previo a la penetración.
Modificar las prácticas sexuales. Deje la penetración de lado por algún tiempo y favorezca los besos, las caricias y los masajes, o el sexo oral, que pueden ser muy satisfactorios para la pareja, permitiendo al mismo tiempo a la mujer liberarse de la obsesión de la penetración y romper el ciclo del dolor.
Evitar los jabones irritantes y las duchas vaginales. El empleo de estos productos deseca los órganos genitales y perjudica al equilibrio bacteriano natural de la flora vaginal, lo que puede implicar infecciones vaginales. En cuanto a las duchas vaginales, use simplemente agua.
Obtener un diagnóstico médico claro y preciso. Los dolores durante una relación sexual pueden ser secundarios a distintas anomalías físicas, Si el médico descubre que la sensación dolorosa está vinculada a un problema físico, lo tratará y comprobará si el dolor tiene repercusiones psicológicas o sexuales. En ese caso el tratamiento debe efectuarse rápidamente, antes de que se instalen la reducción del deseo y el vaginismo.
CUANDO CONSULTAR
1). Presencia de dolor cada vez que tienen una relación sexual, y eso supone un obstáculo al placer.
2). El dolor anticipado implica una reducción de deseo, una reducción de lubricación y las contracciones involuntarias de los músculos vaginales (espasmos).
3). El dolor se experimenta en el fondo de la vagina, obligando a detener la relación sexual, con persistencia de las molestias a posteriori.
4). El dolor se acompaña de pruritos, flujos vaginales, malos olores o sequedad vaginal.
5). Presencia de dolor al orinar después de las relaciones sexuales.
¿QUE SE BUSCA EN EL EXAMEN MÉDICO?
Se preferirá, cuando sea posible, examinar a la paciente después de 24 horas de una relación sexual. Se preguntará sobre el lugar y sobre la naturaleza del dolor así como sobre su sexualidad en general. Luego se procederá a un examen clínico general así como a un examen ginecológico. Exámenes complementarios, como un cultivo de las secreciones vaginales y/o Papanicolau.
Cuando los dolores se sitúan en el fondo de la vagina (dolores profundos), es a menudo difícil establecer un diagnóstico preciso. Se puede pedir una ecotomografía y exámenes generales complementarios.
¿CUAL ES EL TRATAMIENTO DE LOS DOLORES EN LAS RELACIONES SEXUALES DE UNA MUJER?
DOLORES EN PENETRACION
Infecciones vaginales: Aunque la aparición de una infección vaginal puede corresponder a un cambio de pareja sexual, no es considerada como una enfermedad transmitida sexualmente, pero podrían requerir tratamiento ambos integrantes de la pareja.
En el caso de vaginitis micótica, el tratamiento consiste en prescribir medicamentos antimicóticos que se presentan en forma de aplicadores vaginales, supositorios vaginales o tabletas. En caso de repetición, se podría recomendar seguir un tratamiento por tabletas dadas de manera cíclica.
La vaginosis bacteriana es tratada con antibióticos orales, crema antibacterianas, según el caso y la paciente.
Fisuras en la entrada de la vagina . El tratamiento inicial consiste en practicar técnicas de desensibilización sexológicas, acompañado de tratamiento antimicrobiano y regenerativo local. Si la grieta no mejora, se recomienda , una intervención quirúrgica llamada vestibuloplastia, que consiste en rehacer el vestíbulo.
Enfermedades de la piel crónicas. El tratamiento consiste en antihistamínicos en tabletas para aliviar el prurito y de la cortisona en aplicación local para hacer desaparecer las lesiones.
Atrofia vaginal (en la mujer menopausica) . La toma de estrógeno, en forma de tabletas, cremas o anillos vaginales, constituyen el tratamiento de elección.
Vulvodinia : La paciente puede aplicar frió local con compresas o agua fría sobre la vulva. El médico podrá prescribirle un antidepresivo utilizado aquí solamente para su efecto analgésico. Puede también utilizarse relajantes musculares y sedantes.
Vestibulitis. Anomalía compleja, el vestíbulo es objeto de distintos tratamientos. Se pueden proponer suplementos de citrato de calcio y un régimen escaso en oxalatos, es decir, evitando los siguientes alimentos: ruibarbo, ciruelas, pescas, espinacas, cacao, cacahuetes, pimientas, judías, remolachas, apio, perejil, fresas, calabacines, uva y té. También es recomendable tomar un antidepresivo. Una terapia sexual sexológica con enfoque médico da buenos resultados. Finalmente una vestíbuloplastia, en casos rebeldes.
DOLORES PROFUNDOS
Salpingitis Una asociación de antibióticos constituye el tratamiento adecuado para aliviar la infección. Si hay cicatrices fuera del útero, en la cavidad pélvica, un tratamiento complementario podrá eliminarlos.
Endometriosis El tratamiento consiste en parar o frenar la función ovárica y detener el crecimiento anormal de tejido fuera del útero. Se dispone de varios tipos de medicamentos, como los contraceptivos orales, las hormonas que disminuyen el estímulo de los ovarios.
Tratamiento del vaginismo (ver tema sección sexología)